Mi punto de vista sobre «En forma en 70 días», el programa de Chicote

Que Alberto Chicote es carne de show televisivo ya lo sabemos. Todos sus programas buscan la audiencia aunque sea arrastrando a los protagonistas. Pero ayer el programa «En forma en 70 días» dio una vuelta más de tuerca a lo que un programa que pretende concienciar y ayudar debe tener.

Partiendo de la base de que no soy ni entrenador, ni preparador físico, ni nutricionista, debo decir que me considero una persona activa, con nociones básicas en cuanto a pautas nutricionales sanas (o eso creo yo) y con criterio a la hora de saber si alguien con sobrepeso debe ponerse a correr o a hacer según que ejercicios por la playa. Repito, solo pretendo dar mi opinión al respecto del programa, sin ánimo a dar lecciones a nadie de como debe o no debe ponerse en forma.


El concepto del programa ya es erróneo. Me recordó un poco a aquel «Entrena un maratón en 2 semanas» que hizo Calleja. No hay que ponerse en forma en un plazo determinado de tiempo. ¿Los tres voluntarios (o cuatro si incluimos a Chicote) acabaron en forma? Creo que no. ¿Bajaron peso? Sí, rotundamente. Pero de ahí, a estar en forma hay un mundo. Los tres seguían rondando los 100 kilos de peso, pero ya llegaremos a ese punto. El concepto del programa podría haber sido «Ponte en forma desde cero» pero eso no vende. Es mejor decir, «en 70 días serás un atleta». Eso engancha. Reconozco que no podía dejar de verlo. Me quería ir a la cama y dejarlo grabado para verlo hoy, pero me fue imposible despegarme de la tele.


Ver a un supuesto entrenador que acompaña a Chicote trotando durante 9 minutos y ver como sobreactua finjiendo que le falta la respiración del esfuerzo no tuvo desperdicio. Lo mismo que ver como obligaban a un chaval con más de 100 kilos, a hacer unos ejercicios en la playa y a correr 100 metros, para repetir varias veces la serie cambiando el ejercicio. Ese chaval debería tal vez hacer bici estática, o caminar para bajar de peso. Sus rodillas no pueden soportar ese esfuerzo cuando no están acostumbradas. Lo mismo con movimientos tipo sentadillas, mal ejecutados y sin rectificaciones por parte de los «entrenadores» que acompañaban a los voluntarios. Además de ser fustrante para ellos, ¿les servía de algo?

img_0690.jpg
Hay quien dirá que todos bajaron de peso. ¡Claro! De comer rematadamente mal, a mejorar la dieta y además a meter más o menos ejercicio en sus vidas, tiene que haber mejora seguro. La cara de la chica era un poema. Tenía una cara más feliz con todo su sobrepeso que cuando acababa el programa, que se la veía casi triste…

La forma idónea de planteamiento del programa tal vez podría haber sido, hacer esos cambios en el día a día de los protagonistas, de forma progresiva y con sentido. ¿De que le servía a todos ellos hacer flexiones, abdominales o el «mountain climber»? ¿De verdad les ayuda en esta fase inicial de coger hábitos (en esto se tendría que haber centrado el programa) y de cambiar su forma de vida? Caminar, incluso hacer el CA-CO que ofrecían, o una bici estática hubiese sido un tipo de ejercicio adecuado.


El test inicial haciendo remo o tirando lo más lejos posible un balón medicinal me resultó curioso. ¿Así sabrán en que punto se encuentran de inicio? Pero lo remataba el «entrenador» con sus comentarios tipo «has llegado 1,5 metros más lejos, por lo que has mejorado un 15%. ¡Buen trabajo!» Repito, no soy un experto, pero creo que se le podía haber sacado más jugo al programa.

En cuanto a la alimentación también hubo «cosillas». La «pasta» de miel, nueces, cereales, aceite y no recuerdo que más que Chicote preparó con los teóricos alimentos imprescindibles para el desayuno antes de un entrenamiento, creo que no hay nadie que pueda comérselo. No sería mejor unas tostadas, con pavo o con queso fresco, un vaso de leche (con cereales y miel si me apuras), que la pasta que cocinó Chicote? Y menudo susto cuando en la mesa con los alimentos vi los churros y las porras…


En la comida y en la cena tira que te va. Excepto lo de meter pasta o arroz en la cena la noche antes de entrenar… Joder!!! ¡¡Cenaría pasta o arroz todos los días!! ¿Dónde queda la carga de hidratos tan ansiada antes de una prueba? Si cada noche cargo hidratos… No comentaron tampoco, nada sobre comer a media mañana o a media tarde, para mí dos momentos críticos cada día, para no llegar hambriento a las comidas principales.


Si hubiesen cogido a algunos profesionales en nutrición, hubiese sido mucho más productivo. Centrarse solo en el peso o en la circuferencia de la cintura, es quedarse en la «punta del iceberg». El problema en todos los casos era mucho más profundo, pero desconozco si habrá más programas para ver si rectifican. Me da la sensación de que no. Creo que Chicote ya lo comentaba en las pausas con la «voz en off»: «¿valdrá la pena el esfuerzo?» Eso nos da una idea de como se ha gestado el programa.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.