«Hoy no voy a correr con vosotros que hace mucho frío». Esta frase la escuchamos en invierno infinidad de veces de nuestros compañeros de entrenamiento. Y es que el frío es uno de los «desmotivadores» más temibles. Personalmente corro en pantalón corto prácticamente todo el año. Tal vez me pongo las mallas largas un par de días. Esos en los que el termómetro esta cerca del «CERO» o por debajo. El resto, pantalón corto, camiseta y cortavientos, acompañados de un BUFF y de unos guantes.

Y es que el secreto está en moverse. Una vez en movimiento el cuerpo no siente ese frío. A ver… si hace frío hace frío, pero en cuanto entres en calor, no lo notarás tanto. Dicen que el calor lo perdemos por la cabeza y las extremidades, de ahí que los guantes sean una prenda importante en vuestros entrenos invernales. Si acabas teniendo calor, te los quitas y punto. Por eso veréis a mucha gente corriendo en pantalón corto y camiseta de manga corta, pero con guantes… Lo mismo que el BUFF. Que gran invento. Te sirve para taparte la cabeza como si de un gorro se tratara, para taparte el cuello, para cubrir incluso nariz y boca. Yo suelo llevar dos. Uno para el cuello y otro para la cabeza. Truco de Oscar Lunar, amigo y comercial de la tienda INTEMPERIE de Barcelona. Si te da demasiado calor, te lo quitas y te lo pones en la muñeca en dos vueltas. Y de paso te sirve para ir secándote el sudor de la cara.

Donde noto el frío de una manera horrible es en la nariz. Es como que se duerme. Aparecen los «mocos del frío» y se convierte en un incordio durante todo el entreno. Suerte que en Barcelona no hace frío de verdad. Si tuviéramos que salir a correr por Soria, por decir un lugar frío, yo creo que acabaría practicando otro deporte.

¿Y vosotros? ¿Algún truco para combatir al frío?