Hoy tocaba correr en Puigsacalm. El año pasado fue la primera cursa en la que no participé a pesar de estar inscrito. La sensatez (de la que muchas veces carezco), me hizo no correr para no hacer mas grave la lesión de tobillo y la fastitis plantar que arrastraba desde verano.
Os parecerá una tontería, pero fui a ver llegar a los miembros del team que si corrían, y os aseguro que desde la barrera se sufre también. Si, esta claro… es un sufrimiento distinto, pero se siente…
Hoy era el momento de sacarme esa espinita. Las condiciones no eran las mismas que el año pasado, en el que no dejo de llover durante todo el fin de semana, pero para mi era una carrera totalmente desconocida. Estoy bastante mejor físicamente, y no he dejado de entrenar desde marzo, haciendo además entrenamiento cruzado con bici de montaña y carretera. Ahora estoy recogiendo los frutos de ese trabajo. Este entreno y la bajada de peso me ayudan a estar un poquito más arriba en las carreras.

Foto del team antes de empezar. Los nervios ya estaban a flor de piel. Cesar ya llevaba calentado una media hora, mientras el resto acabábamos de tomar un café. Albert no corría hoy, más por miedo a perder un avión que debía coger esta tarde que por la lesión de la que ya está recuperado. El año pasado tardo casi 7 horas en acabar la carrera, y no se fiaba.
Al dirigirnos a la salida, Cesar se pone en la parte delantera. Todo el team pensamos que tiene opciones de podium de nuevo. El es más conservador y ya ayer me comentaba que tal vez quede entre los 10 primeros. Es un crack. Anoche cenando ya estaba concentrado.
El resto nos vamos a la parte de atras. Nos damos los últimos ánimos, los últimos abrazos, los últimos choques de manos y salimos. Muy rápido para mi gusto, pero mientras Alfonso, Manu, Toni y Artur se marchan delante, formamos un grupo de cinco entre David, Ivan, Pere, Nando y yo. Ilda va un poco mas atrás, aunque para ella la carrera ha durado poco, al tener que retirarse en el kilómetro 4 aprox., justo cuando empezaba la subida.
La subida inicial es de unos 200 metros de desnivel en una distancia de unos 3 kilómetros. Allí, en el primer avituallamiento ya no vienen Ivan y Nando, que se han quedado rezagados. En algún momento de la parte plana, Ivan y yo ya habíamos comentado que íbamos demasiado rápido. Estamos ya en el kilómetro 8, y nos juntamos en el avituallamiento David, Pere, Toni y yo.
Salimos de nuevo y esta vez soy yo el que se queda. Veo que van más rápido que yo, y la subida continua y cada vez es mas pronunciada. Lo primero que me pasa por la cabeza es que voy a tener que hacer otra carrera en solitario. Si sigo a este ritmo Ivan y Nando no van a poder cogerme, pero está claro que yo ya no alcanzo a Pere y al resto a no ser que pinchen.
La subida es brutal… Se me hace durísima. Me arrepiento de no haber cogido más la bici en las últimas semanas, y de no haber hecho ningún entreno más especifico para subir esas rampas. El recorrido son «corrillos» con alguna piedra, pero lo bueno viene ahora…
Llegamos a una PARED en la que hay cuerdas y cadenas para ir cogiéndose, e incluso hay unos «escalones» clavados en la roca. Esto es escalada… a mi que me perdonen… Pero es increíble. Las vistas en esa zona hacen que sufrir lo que hemos sufrido subiendo valga la pena. Ascendemos unos 850 metros en poco mas de 5 kilómetros… Empieza a verse bastante niebla y hace un aire frío. Estamos casi a 1500 metros de altitud, y se nota. En uno de los tramos me junto a una pareja en la que la chica va un poco mas rezagada en ese momento y vamos un par de kilómetros comentando. Se ha ganado la pulsera del team, por lo que se la entrego «in situ» para que la luzca con sus colegas… 😉
Aunque os parezca mentira, aquello parece Las Ramblas de Barcelona… Un montón de gente esta en la montaña. Me ha sorprendido la cantidad de gente mayor (de unos 60 años) que subía o bajada por donde estábamos «corriendo».
Ahora solo queda bajar. Bueno… ciertamente hay tres subidas bastantes más suaves y la bajada, que aunque todos deseamos que llegue, al final es tan técnica que se hace complicado ir rápido. Tramos con cuerdas y tramos con barro hacen que el ritmo sea lento. Resbalones, caídas, tramos andando… Lo que tuvieron que pasar los Morlacos el año pasado… Bufff….
Cuando faltan 10kms llego a un avituallamiento, en el que tras un par de vasos de Coca-Cola y de rellenar la botella del cinturón de hidratación, arranco. Miro un momento atrás y veo que Ivan esta llegando. «Tranquilo, que te espero»… He visto la luz… Nando no viene, pero voy a intentar mantener el ritmo de Ivan, que parece que va más entero que yo. Arrancamos junto a la pareja de antes y seguimos subiendo y bajando. Tras unos kilómetros los cuatro, llegamos al penúltimo avituallamiento y nos encontramos a Toni, con el que ya iremos hasta el final. La bajada que viene ahora es muy técnica por lo que nos cuenta Ivan. Ivan tira delante, yo le sigo, pero Toni se queda un poco. Comentamos con Ivan que lo esperaremos en el avituallamiento que hay a falta de 1,5 kilómetros de meta, y que desde allí ya vamos juntos.
Toni llega al avituallamiento y miramos el reloj. Llevamos 4 horas 45 minutos de carrera. Vamos a ver si bajamos de 5 horas… ¿no? Pues a eso vamos… Este kilómetro y medio es por asfalto casi todo, y se hace eterno. El calor ya aprieta también, pero estamos tan cerca de meta, que todo da igual. Cuando faltan unos 400 metros vemos a Cesar que viene corriendo a recibirnos para acompañarnos hasta el final. El ha acabado en poco más de 3 horas… ¡¡Vaya crack!! y nos va contando como han llegado el resto de Morlacos.
La llegada a meta es una fiesta. Ahora solo falta esperar a Nando, que ha tardado una media hora más. Ha tenido un problemilla con el pie en el que se hizo daño jugando a fútbol esta semana, y eso le ha condicionado la carrera, pero al final Finisher también… Al llegar a la esquina para coger la recta de meta, el resto del equipo hemos arrancado a correr con el para acompañarlo hasta meta… Seguro que le ha encantado…

En definitiva. La Cursa de Puigsacalm es una de las joyas de la corona de las carreras de montaña que tenemos por aquí. Es cita obligada para los que queráis poner a prueba vuestro estado de forma. Como decía un runner con el que hemos estado comentando la cursa, es una carrera técnica, que realmente «te pone en tu sitio» dejándote muy claro en que estado de forma estas. Eso si… No apta para gente con vértigo… 😉 Lo sentimos Jordi…