Ayer un compañero del team compartía en Facebook un artículo sobre una cursa de 5km paralela a la ya histórica Jean Bouin de Barcelona, que este año celebra su 90a edición el próximo 24 de Noviembre. El artículo comentaba el desmesurado precio que tiene la versión corta de esta carrera, que asciende a 18€… ¿Estamos volviéndonos locos? Esta claro que corremos para disfrutar, que los corredores populares corremos para mejorar los tiempos a titulo personal, para «competir» con los amigos, para divertirnos. ¿A qué tenemos derecho con esos 18€? A una camiseta técnica ASICS, que conmemora la 90a edición de la carrera. ¿Es suficiente para lo que estamos pagando? No olvidemos que la cursa de 10 kilómetros cuesta este año 20€ si no tienes chip propio.
Si nos metemos en carreras de montaña, los precios se disparan. Lo mismo que si vamos a medias maratones o a maratones. Es medianamente comprensible, ya que los costes de organización de un evento en el que tengas que cortar la circulación de una gran urbe como Barcelona (por proximidad), es muy alto. Triatlones, duatlones… Los precios van subiendo. En ocasiones el regalo por acabar la carrera, o la bolsa de corredor que te dan por inscribirte, compensa el coste, pero en otras no.
¿Correr es barato? La respuesta es no. O tal vez si, pero solo cuando empiezas. Cuando empiezas a correr te da igual todo. Te da igual si eres pronador o supinador, si vas más o menos deprisa, si corres con lo ultimo en ropa deportiva, o si tu frecuencia cardíaca va por encima del 80% de tu máximo. Esto es así el primer mes… Y eso si no empiezas a correr con un grupo ya «experto».
Después te enteras que eres pronador, y que las zapas que a ti te van bien por tu peso y tu tipo de pisada cuestan 150€, y que si sigues corriendo con las que has empezado tendrás problemas de rodilla. Te enteras de que además, es muy probable que unas platillas solucionen esa pequeña molestia que notas cuando llevas una media hora corriendo. Te dice un amigo que lo mejor para mejorar es entrenar «por pulsaciones» y que ya que te pones, que mejor que saber por donde corres, y a que ritmo, por lo que vas a acabar comprándote un GPS que te da todos los datos posibles.
Cuando empezaste a correr aprovechaste unas «bambas» que tenías en casa. Cualquier pantalón corto te iba bien, y esa camiseta de algodón que te regalaron en la fiesta Jack Daniel’s de tu bar favorito te parecía perfecta. Ahora ya no.
Y no hablemos de correr por montaña… Todos vemos a Kilian en plan minimalista, pero el es un ELEGIDO… Tu vas a necesitar bastones, mochila de hidratación, otras «zapas» especificas para montaña, en función de terreno por el que vas a correr, unas mallas, que los pantalones cortos te hacen rozaduras. Unas gafas de sol «molonas», una gorra, un frontal para correr de noche, calcetines compresores… Bufff.
Sales a correr con miedo a que alguien te atraque… Sacarían mas por todo el material que llevan, que si asaltan un furgón blindado a la salida de un banco… Suerte que por la montaña no hay mucho «amante de lo ajeno», y la gente que te encuentras va del mismo palo que tu, y esta allí para disfrutar de la soledad y del paisaje…
En definitiva… Correr NO ES BARATO… Que no te engañen… Eso si. Te va a encantar…
Yo creo que va a por fases, como bien comentas al principio pasas de todo y te vistes con lo primero que encuentras, luego te vuelves competitivo e intentas estar a la última para rascar ese segundo pero finalmente decides que lo que realmente importa no es la meta sino el trayecto y ahí ya sabes que lo secundario es como y donde.
Gran entrada, salud!
Gracias David!! Viniendo de ti es un elogio!!! 😉
Como tu dices, llega un momento que lo importante es el como lo vives…
Gracias mil!
primero corres con lo justo, después vas tipo robocop, pero al final acabas con unos deportivos pantalón o maya camiseta y un cronometro como mucho pulsometro y a rodarrrr